Uno de los proyectos familiares por excelencia es la educación de los hijos. Un porcentaje cercano al 70% de los casos en que se presenta abandono de los estudios se origina en la imposibilidad económica de continuar con ellos.
Por lo que es fundamental garantizar los recursos para el caso en que alguno de los padres se vea afectado por riesgos como invalidez por accidente o enfermedad e incluso el fallecimiento.
Para ello es importante contar con un seguro que, dependiendo de las posibilidades de cada familia, se contrate una póliza que satisfaga cada uno de los siguientes propósitos:
Propósito
- Que los estudios de los hijos no se vean truncados por el efecto económico del fallecimiento del padre o la madre.
- Que al final de una etapa de estudios, los hijos cuenten con una cantidad (Dote) para continuar sus estudios o iniciar su vida profesional.
- Que la invalidez, por accidente o enfermedad del padre o la madre no impidan la continuidad de los estudios.
- Que el plan de seguro no se vea interrumpido en caso de que por una invalidez ya no se puedan pagar las primas.
Cobertura
- Básica de vida para el padre, la madre o ambos por el tiempo en que los hijos están estudiando.
- Dotal sobre los hijos para que al cumplir la edad de terminación de la preparatoria o licenciatura cuenten con dicha dote.
- Cobertura adicional con pago de una suma en caso de presentarse la invalidez o incapacidad.
- Cobertura adicional que exime del pago de primas de seguro por fallecimiento en caso de invalidez del titular de la póliza.
Fuente: AMIS
Mis hijos tienen un seguro educativo y considero que es el mejor regalo que puedo darles, pues asi garantizo su educación.