La International Youth Foundation (IYF) lleva aproximadamente 25 años en el mercado trabajando en 98 países y a lo largo de su historia ha tenido una transformación importante, que abarca desde la salud sexual y reproductiva, educación, hasta temas de nutrición.
A lo largo del tiempo, la IYF, se ha especializado en programas de fuerza laboral. En México, hay fuerzas laborales comparables a las de Singapur, China o con otros países del primer mundo, también, hay empresas con fuerzas laborales de tercer mundo.
México tiene 20 años con una tasa de crecimiento baja (al 2%) de una manera general, donde existen personas que participan en la economía informal con salarios muy pequeños y que se ubican por debajo de la línea del bienestar, donde entran en un estado de pobreza laboral y que no sólo no les alcanza con lo que ganan teniendo una capacidad de ahorro nula, sino que además se endeudan y cualquier enfermedad o problema que le aqueja, afecta y desestabiliza a su familia.
La IYF, empezó a trabajar en nuestro país con los chicos de bachillerato técnico público, los cuales son dos millones de cinco que estudian la preparatoria pública.
El ingreso de una familia que lleva a su hijo a este tipo de bachilleratos, es en promedio de cinco mil pesos mensuales, lo cual los pone en situación de pobreza. En el 70% de los casos, los padres de familia no terminaron la preparatoria y de manera regular, es el primogénito quien tendrá la oportunidad de estudiar la educación media superior por primera vez, además de que los bachilleratos técnicos registran el mayor índice de deserción escolar a nivel nacional.
El 80% de los jóvenes que logran egresar de una escuela técnica, dependen de su red familiar para conseguir su primer empleo, pero como sus padres generalmente no acabaron sus estudios, estos chicos terminan buscando un empleo en la informalidad.
Según datos arrojados por el INEGI, el 60% de los egresados tiene un ingreso de tres mil pesos, quienes en el mayor caso no tienen prestaciones.
El reto para la fundación es cómo hacer para que un joven recién egresado encuentre un empleo de una carrera técnica, se le pague siete mil pesos o más y con seguridad social. En todo el espectro de trabajo hay cosas muy sofisticadas como innovación y desarrollo, hasta cosas como mantenimiento y el sistema educativo está preparado para cubrir todos los espectros.
