De acuerdo con la National Chicken Council, durante el Super Bowl 51°, se consumió aproximadamente 1,330 millones de alas de pollo; 14,500 toneladas de papas; 4,000 toneladas de palomitas y cerca de 50 millones de cajas de cerveza.
Sumado a esto, se invirtió cerca de 200 millones de dólares para abastecer la demanda del aguacate durante este evento… Impresionante, ¿no lo crees?
Sin embargo, cuando leías estas cantidades, ¿te preguntaste sobre el impacto ambiental? Probablemente no, pero realizar este tipo de eventos genera una gran cantidad de basura y emisiones.
Mientras que algunos patrocinadores están invirtiendo constantemente, en proyectos de energía renovable que pueden ayudar a contrarrestar el impacto que se genera de los viajes de los equipos y el personal involucrado en el Super Bowl.
Ahora, para esta próxima edición, los responsables de este magno evento deportivo han decidido realizar un Super Bowl cero residuos, en el que la sustentabilidad se vuelva una de sus principales estrellas.
El equipo de la NFL decidió crear una alianza responsable con PepsiCo, US Bank Stadium y la autoridad de Instalaciones Deportivas de Minnesota para impulsar un Super Bowl cero residuos.
Esta unión dio paso al programa Rush2Recycle, que tiene como principal meta recuperar más del 90% de los desechos del estadio durante el Super Bowl LII. La iniciativa, además, busca dejar un legado en el US Bank Stadium y crear un libro para las próximas ligas en las que los consumidores, los equipos y demás involucrados puedan conocer cómo controlar los desechos en sus propias comunidades.
Para conseguir parte del éxito de este programa, los involucrados en el US Bank Stadium, introdujeron un sistema de recolección de desechos de tres compartimientos, un compactador especializado y además, implementaron una clasificación de desechos detallada.
Fuente: ExpokNews