El teléfono móvil (celular) se ha convertido en una herramienta imprescindible; actualmente podemos revisar nuestro correo electrónico, actualizar nuestras redes sociales, encontrar una dirección, tomar fotografías y videos, leer las noticias y contestar y realizar llamadas entre miles de funciones más.
En México se estima que hay casi 95 millones de líneas móviles, de las cuales 85.4% son de “prepago” y el restante 14.6% son de plan de renta mensual; 14.6 millones de celulares son del tipo conocido como “smartphones” o teléfonos inteligentes.
Sin embargo, la facilidad de recibir un crédito para tener “el mejor” celular o el aparato de moda ha causado graves problemas en la economía de muchas familias mexicanas que terminan endeudándose por años.
En el país existen cinco compañías de telefonía móvil; Telcel, Movistar, Iusacell, Unefon y Nextel (que ofrece el servicio de radio como producto principal) las cuales cuentan con un sinfín de planes para prácticamente todas las necesidades.
Es necesario saber que la contratación de un plan de renta mensual es una manera de iniciar un historial crediticio que posibilite el préstamo de un futuro crédito de mayor monto o que termine enviándote al Buró de Crédito. Es por eso que es importante conocer su presupuesto destinado, el precio del celular, conocer sus patrones de consumo y buscar un plan a su medida.
Sarah Barajas, profesora investigadora en el área de negocios de la Universidad Panamericana, comenta que pese a “ser una inminente necesidad” tener un celular y que, actualmente ya no es un lujo, “es importante hacer uso de este servicio con base en sus posibilidades económicas para preservar sus finanzas (…) los usuarios deberán administrar su consumo mensual y tratar de no rebasarlo porque sino le afectará a su bolsillo de manera importante”.
Para Sofía Macías, vocera del programa Consumo Inteligente de MasterCard, el desembolso semanal o mensual en telefonía móvil ya es parte de la canasta básica de muchas personas, por lo que recomendó hacer un análisis sincero sobre los minutos que utiliza al mes para conocer su patrón de consumo real y evitar “fugas de efectivo” generadas por la “facilidad de realizar una recarga” que suelen afectar las finanzas de las personas que no planean sus gastos.
En México, se estima que 30% de los usuarios del servicio de “prepago” gastan entre 50 y 100 pesos a la semana en promedio, mientras que las rentas mensuales abarcan de los 300 a los mil 500 pesos, dependiendo los “extras” que desee incluir como cuánto internet, minutos de llamadas y mensajes se incluyen, si quiere un seguro en caso de robo, entre otros más; además que estos planes suelen necesitar una tarjeta de crédito en donde se realizará el cargo o dejar una cantidad en garantía; debe poner especial atención en el plazo forzoso, pues hay algunos que llegan hasta los tres o cuatro años.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) da una serie de consejos antes de contratar o comprar un celular:
- Escoja los planes que más le convengan.
- Pregunte por el costo por minuto en cada uno de esos planes.
- Esté actualizado para prever cualquier cambio de precios. La empresa está obligada a notificarlo con un mes de anticipación.
- Tenga en cuenta que la falta de pago es causa de suspensión de su línea, además que la compañía podrá reportarlo al Buró de Crédito.
- No exceda su capacidad de pago.
- Revise si puede fijar un máximo en su cargo mensual para evitar exceder su presupuesto.
Es cierto que los celulares nos facilitan nuestra vida diaria, pero debemos tener cuidado con el dinero que invertimos en estos aparatos pues si lo único que busca es estar “a la vanguardia”, lamentamos informarle que su móvil pasará de moda en un año o menos debido al ritmo que tienen las mejoras y avances tecnológicos actualmente.
(Con información de El Universal – Cartera)
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